domingo, 18 de mayo de 2008

Una mañana.

Una mañana cualquiera, parece estar naciendo un día agradable, lleno de esperanza. El cielo despejado de nubes deja al descubierto un celeste intenso y el sol poco a poco se vuelve más brillante, templando el ambiente. Se siente el clima tan armonioso que si se inspira profundo uno simplemente es feliz. En esta experiencia de algunos segundos en que nuestro espíritu recarga energías dan ganas de sonreír y seguramente se presente en nuestros pensamientos alguna buena anécdota, que hará aun más grande la sonrisa. Pareceremos locos ante la mirada de extraños. Pero poco importa, ya que un florecer de sensaciones son vividos por nuestro ser, como si el anhelo de eternidad se hiciera real en en ese momento en nosotros.

3 comentarios:

Mare dijo...

Muy lindo post. Qué bueno parecer locos ante la mirada de extraños, y qué bueno que poco importe!!

Anónimo dijo...

Es como ir cantando sola por la calle, y que la gente te mire y diga "mirá esa loca que canta sola" y sin embargo, no enterarte, porque vos estás cantando y sos feliz...

George dijo...

Mare: "Jardines de calma feroz
un sol de infinita paciencia
los locos cantan su canción
y aplauden", poco importa.

Gracias!!!

Pau: Es un ejemplo valido, tiene que ver un poco con la abstración del contexto con un hecho sencillo.